Es conocido por todo el mundo de la construcción lo peligroso que resulta trabajar sobre estructuras de andamios. Los andamios suelen ser construidos a tales alturas que cualquier caída puede ocasionar la muerte del trabajador o lesiones permanentes en zonas tan sensibles como la cabeza, el cuello, o la columna vertebral.

Por eso hay que extremar siempre las precauciones cuando se realizan trabajos desde estas estructuras y por supuesto mantener todas las medidas de seguridad tanto individual como colectiva en orden.

Los principales accidentes que se registran en los trabajos realizados desde andamios son las caídas de materiales, los resbalones y tropiezos de los operarios y por último y no por ello menos grave (más bien al contrario) las caídas de altura.

Caídas de materiales desde andamios

El riesgo de caída de esos materiales va desde a herramientas y utensilios de uso cotidiano por parte de los trabajadores hasta herramientas pesadas o los propios postes del andamio. Hay que asegurarse de que la red de escombros que protege el andamio no tenga ninguna fisura ni abertura por la que pueda caer cualquiera de estos materiales.

Resbalones y tropiezos en andamios

Para evitarlos es preciso tener un buen mantenimiento de las estructuras de andamios, entre otras cosas manteniéndolos limpios de materiales y herramientas, teniendo los cables en orden y recogidos y recogiendo cualquier líquido que pueda caer sobre ellos y

Las caídas de altura en andamios

Uno de los principales riesgos a la hora de trabajar en un andamio son las caídas de personas a distinto nivel. Para evitarlas es importante conseguir un cerramiento perimetral mediante largueros o tablas dispuestos a modo de barandillas o bien mediante una red vertical sujeta a puntos resistentes que cubra todo el vano.