A la hora de hablar de medios de protección colectiva en una obra de construcción, las redes de seguridad son uno de los elementos fundamentales para garantizar la seguridad de los trabajadores. Y dentro de los sistemas de redes de seguridad, hay que contar con un elemento fundamental para su correcto funcionamiento, los medios de fijación de las redes de seguridad.

Cualquier red de seguridad, debe estar bordeada, encuadrada o asegurada por un elemento denominado soporte. El conjunto de ambos elementos, red y soporte debe estar anclado a los elementos fijos de la construcción para así, garantizar una protección eficiente.

Los soporte se pueden dividir en dos grupos:

1.- Soportes para redes que impidan la caída.
2.- Soportes para redes que limitan la altura de la caída.

1.- Soportes para redes que impiden la caída

Para redes tipo tenis:

Este tipo de redes hacen la función de una barandilla de protección de borde de forjado, colocándose en la cara interior de la última fila de pilares de la construcción.

En este caso, el anclaje a la construcción se realiza atando las cuerdas perimetrales inferior y superior a los pilares (también pueden usarse otros elementos siempre que sean resistentes). La cuerda inferior se anclará utilizando barquillas embebidas en el propio hormigón separadas un metro unas de otras.

Para red vertical de fachadas:

Son redes de seguridad adosadas a las fachadas que impiden la caída de operarios y materiales al exterior. Se utilizan normalmente soportes de dos tipos:

● Mástil vertical (mástil con brazo horizontal).
● Horca.

Anclajes: Dependiendo de si se trata de anclajes para soporte vertical u horca se realizará:

a. Para soporte vertical (mástil): Se utiliza un P.N.U. 100 x 50 x 61 o cualquier otro sistema lo suficientemente resistente. Lo que se pretende conseguir con ese tipo de anclaje, es una «U» que consigue separar la red de la fachada.

b. Para soporte de horca
❍ Dejando unos cajetines al hormigonar los forjados.
❍ Colocando al hormigonar, en el borde del forjado, una horquilla de redondo normal de construcción, de diámetro no inferior a 12 mm. Se debe prohibir la utilización de aceros especiales, ya que sus límites elásticos son demasiado altos y su maleabilidad es pequeña.

c. En cualquier caso, la parte inferior de la red se debe sujetar a los anclajes dejados en el forjado al hormigonar. Su separación será de 1 metro aproximadamente.

Para la red de desencofrado

Se trata de redes de 3,50 m de anchura y longitud variable, cuyo fin es cubrir el perímetro de la fachada entre dos forjados consecutivos.

La red se ata con cuerda de poliamida con un diámetro mínimo de 10 mm, o mosquetones metálicos a los anclajes que previamente se han preparado en el suelo de la planta en la que estamos trabajando y en el de la siguiente, estos además se han usado para atar la red de seguridad durante la construcción de la estructura.

2.- Soportes para redes que limiten la altura de caída

Existe normativa en diferentes países que admite que la caída libre de una persona sobre una superficie elástica sea desde un máximo de 6 metros. Sin embargo, la práctica aconseja que esta se reduzca al mínimo de altura posible siendo ideal que en la medida de lo posible, se lleven las redes al forjado inmediatamente inferior a la superficie de trabajo.

Soporte tipo horca: Está formado por un soporte vertical con brazo horizontal. El tamaño del soporte se determina cuando se conoca el esfuerzo transmitido al mismo, con el fin de que trabaje dentro del límite elástico y con un coeficiente de seguridad adecuado al mismo.

Redes horizontales: En este caso, hay que distinguir dos posibilidades dependiendo del tipo de soporte y anclaje:

● Para la protección de patios de luces, huecos de ascensores y, en general, huecos en forjados.
En este caso no es necesario un soporte especial para poder unir directamente la cuerda perimetral a unos anclajes previamente instalados en el forjado.

● Para la protección de bordes de forjado (fachadas) son varios los modelos de soporte y la forma de anclarlos al edificio. En este caso, sin embargo, existen dos tipos:

a. Soporte metálico constituido por un tubo de 50 mm de diámetro y una longitud aproximada total de 5 m. Se ancla al forjado, unido a la «base sustentadora». Esa base se sujeta bien por medio de dos puntales suelo-techo o
bien perforando el forjado e introduciendo dos pasadores.
En caso de impacto, el soporte se cierra sobre el edificio quedando recogido el operario en la bolsa que forma la red. Es necesario para este tipo de soportes que cada 10 m se arriostre alguno de ellos a los pilares, consiguiendo así que cuando la red recibe un gran peso, no se deformen los soportes en el plano horizontal.

b. Soporte metálico compuesto por un larguero vertical sobre el que se sujeta un brazo móvil donde va incorporada la red. El larguero fijo vertical va apoyado sobre el borde de dos forjados consecutivos, y se sujeta al superior mediante un gato u otros sistemas de fijación. El brazo móvil gira sobre un plano vertical perpendicular a la fachada.